EL AVIÓN

Reporto el día de hoy para contar una historia real. Me encontraba a 20 minutos de haber despegado en un cómodo avión con poco más de la mitad de pasajeros, recibiendo de un sobrecargo que se parecía mucho a Jude Law (no tengo foto, necesito una cámara) un rico sandwich de queso, cuando el piloto informa en el altavoz "ich gich gich, mich gich gich gichm, splat under, mich gich gich". Yo, como no sé alemán, dije "ah chingá, ¿qué pasó?, ¿tendrá que ver con la comida?" y empecé a mordisquear rápidamente mi sandwich, no fuera que me lo quisieran quitar. Pero no, minutos después se nos informa en un inglés medio mich michoso que nos regresamos al aeropuerto y que luego nos informarán cuál será nuestro panorama. Yo estaba que me rellevaba la rechingada. Había gente esperándome en mi destino y no tenía forma de avisar.
Total que 20 mentadas y 20 minutos después -a minuto la mentada- llegamos de nuevo al aeropuerto de partida y salimos por el tubo hasta la terminal. Cuando salgo del tubo veo mucha gente asomada por la ventana y me acerco yo también a mirar. Oh! Shock! El parabrisas del avión tenía una rajada bastante considerable de lado izquierdo (no tengo foto, maldita sea. Nota mental:comprar una cámara). Con razón los oídos tapados que no se destapaban con nada. Me sentí mal por mis rementadas y empecé a dar gracias a Dios por haber aterrizado con bien. Todos los demás parecían estar experimentando la misma sensación porque se dirigieron como corderitos a la nueva sala de espera... y ya nadie nunca más se quejó de nada.

PS. En el segundo avión nos volvieron a dar sandwich, por los que no alcanzaron a recibir el suyo, así que me comí dos! jeje